¿Cutis seco después del verano?
Después del verano, nuestro cutis queda deshidratado, principalmente como consecuencia de las radiaciones solares. Por eso es necesaria una buena sesión de hidratación una vez terminada esta estación, ya que la presencia de agua en nuestra piel es la clave de la luminosidad, vitalidad y belleza que muestra.
Hay que diferenciar entre piel seca y piel deshidratada, ya que estos términos se confunden a menudo. A una piel seca le faltan lípidos, mientras que a una piel deshidratada le falta agua. En la práctica resulta difícil diferenciarlas, porque una piel seca tiende también a estar deshidratada.
Una piel deshidratada se puede diferenciar por la presencia de escamas, un déficit de sebo, y un tacto rugoso. Además está tensa, y le falta suavidad y elasticidad.
Antes de empezar con nuestra hidratación cutánea, hay que limpiar muy bien el rostro.
La sesión de hidratación la iniciaremos utilizando un sérum hidratante, como por ejemplo el Sérum hidratante Hydrance Optimale de Avène®, que ofrece una textura muy agradable y una rápida absorción, además de una alta concentración en activos. Hay que usarlo por la mañana y por la noche aplicando algunas gotas del sérum haciendo pequeños movimientos circulares y dejándo que penetre durante algunos minutos. Seguidamente completaremos la hidratación con la crema/emulsión hidratante, como por ejemplo la Hydrance Optimale® ligera/rica o la Crème Prodigeuse® de Nuxe. Finalizaremos aplicándonos nuestro producto de cuidado habitual.
Para pieles muy deshidratadas y fragilizadas, se recomienda la aplicación de mascarillas hidratantes una o dos veces por semana, ya que aportan una textura más cremosa y son verdaderas bombas de hidratación
Etiquetas: hidratación
Deje un comentario